LA PALABRA DEL DILUVIO

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2025-08-09 03:00:00
Por eso dijo Jehová: «Borraré de la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo, pues me arrepiento de haberlos hecho.»
Génesis 6.7
Cuando el Señor habla, lo mejor es obedecer. Los que no le escuchen sufrirán el rigor de Su decisión. Nada llegó a existir por casualidad, pero muchos insisten en la tesis de que Dios no existe. Él los llevará a un fin eterno. Como también fueron hechos a imagen y semejanza del Altísimo, siendo parte de Su Espíritu, sufrirán en el lago de fuego y azufre y nunca saldrán de allí. ¡Piedad!
Antes de traer el Diluvio sobre la Tierra, el Señor le dijo a Noé, su fiel siervo, para que advirtiera a la gente de la época que el mundo sería destruido de esta manera. Noé se puso entonces a construir un arca para que se salvaran los que creyeran en Dios. La Palabra dice que él halló gracia ante los ojos de Jehová (Génesis 6.8). Pero la gente ignoró a Noé, así que solo se salvaron él y su familia: su mujer, sus tres hijos y sus tres nueras. Todo lo que predicó se cumplió. ¡Esté atento!
Después de la lluvia que inundó completamente el planeta, la Palabra advierte a los que no tienen verdadera fe en Dios que se preparen, porque Jesús volverá para rescatar a Su Iglesia. Todos los que no han atendido al Evangelio, a la Buena Nueva de lo que el Salvador ha hecho en favor de la humanidad, no subirán con Él, sino que marcharán al tormento eterno. ¡Crea en la Palabra y viva plenamente!
No es difícil separarse de los perdidos. Todo lo que tiene que hacer es prestar atención a la ministración de las Escrituras, todo está escrito en ellas. Cualquiera que tome la decisión de aceptar lo que Jesús realizó en la cruz será iluminado y salvado. Sin embargo, quien rechace la oferta del Señor de ser redimido se unirá a los que rechazaron las advertencias de Noé y murieron en las aguas. ¡El Creador, de quien procedemos, también nos amonesta hoy!
El propio Jesús refrendó los registros sobre el Diluvio, diciendo que al igual que ocurrió en tiempos de Noé, también ocurrirá en nuestros días. Cristo hizo hincapié en que la gente se casaba y se daba en casamiento, hasta que Noé entró en el arca y sobrevino el Diluvio. Imagínese cuántos pasaron de las lágrimas a los gritos desesperados pidiendo perdón, ¡porque querían salvarse! Pero no se pudo hacer nada. Esté alerta y prepárese, porque cuando suene la trompeta, el Señor regresará.
Cuando Jesús regrese, no habrá tiempo para prepararse. La persona que oye el Evangelio y lo desprecia ya ha tomado una decisión. Quien dice que decidirá más tarde, también ha relegado la invitación divina a algo sin importancia. Jesús declaró: »Os digo que en aquella noche estarán dos en una cama: el uno será tomado y el otro será dejado. (S. Lucas 17.34). ¿Por qué mucha gente no cree realmente en Dios?
El diablo ha engañado a muchas personas que aman el pecado, diciéndoles que todavía tienen razón y que pueden seguir transgrediendo. Piensan que, cuando vuelva el Señor, suplicarán su favor y lo obtendrán, pero la Palabra no dice esto. La Biblia dice: Vosotros, pues, también, estad preparados, porque a la hora que no penséis el Hijo del hombre vendrá.» (S. Lucas 12.40).
En Cristo, con amor,
R. R. Soares
La Oración de Hoy
¡Dios, nuestro Rescatador! Queremos confesarte que hemos aceptado Tu advertencia y hemos aceptado a Jesús como nuestro Salvador y Señor. Te damos gracias por habernos advertido a tiempo. Ahora Te pertenecemos. ¡Tenemos que ayudar a otros a prepararse y escapar de la condena anunciada!
Despierta a nuestros amigos, familiares y a tantos que no tienen la bendición de ser salvos. Será triste verlos en el grupo que marchará al Infierno. Tu Palabra ha llegado hasta nosotros, dándonos la certeza de que viviremos en Tu bendito Hogar.
Debemos tener la sabiduría de predicar el Evangelio a toda criatura, llevando el mensaje con la alegría de Cristo. De este modo, Te daremos verdadera alabanza. Caminar a Tu lado da más placer que las riquezas de este mundo. ¡Daremos testimonio de Tu bondad y fidelidad!