ENSEÑANDO A TODOS

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2024-11-10 03:00:00

Entonces habló Jesús a la gente y a sus discípulos, diciendo:


San Mateo 23.1

A partir de este mensaje, empezamos un estudio de las lecciones de Jesús, registradas en el capítulo 23 de San Mateo, para mejorar nuestro comportamiento en la fe en Cristo. Nunca haga algo, dé una respuesta o enseñe a alguien que no esté de acuerdo con la Biblia. Sirva a Dios como Él le enseña, para que sea aprobado como siervo bueno y fiel (S. Mateo 25.21-23). El Salvador declaró que no hacía nada sin escuchar al Altísimo (S. Juan 15.15). ¡Diga lo mismo!

Jesús creó todo siguiendo las instrucciones del Padre. Examinó la obra del Hijo y vio que era buena (Génesis 1.31). Las enseñanzas del Maestro no contienen errores y cumplen la promesa del Salmo 32.8: «Te haré entender y te enseñaré el camino en que debes andar; sobre ti fijaré mis ojos. ¿Por qué dejar de lado la guía perfecta y afirmar lo que Dios no dice? Entienda: en la Sagrada Escritura, el Señor trató diferentes temas.

Mateo fue cuidadoso al decir que Jesús habló a la multitud y a Sus discípulos. Así que no deje que el diablo le engañe sugiriéndole que no hace falta estudiar las lecciones dejadas por el Maestro a menos que quiera dejar de progresar y pecar. Somos hijos de Dios y necesitamos toda guía de Él, ya que la de los hombres está contaminada de vicios e incapacidades.

Cristo empezó Su “clase”, llamando la atención de la multitud y de los discípulos hacia las revelaciones del Padre celestial, para que pudieran mejorar su servicio a Dios y al final ser aprobados. Nunca sea un cristiano negligente, negándose a aprender del Ser que creó todas las cosas de la nada (S. Juan 1.1-2). Necesitamos ser instruidos por Quien es Omnisciente – lo sabe todas las cosas. Los escribas y fariseos, al escuchar a Jesús, recibieron duras reprimendas.

Quien aprende del Hijo de Dios se vuelve sabio, aunque no tenga estudios, como sucedió con Pedro y Juan. Hablaban con valentía a los sacerdotes de la voluntad del Señor, hecho que sorprendió a los religiosos: Entonces viendo la valentía de Pedro y de Juan, y sabiendo que eran hombres sin letras y del vulgo, se admiraban; y les reconocían que habían estado con Jesús. (Hechos 4.13). ¡Sorprender a las autoridades y al pueblo es nuestra misión!

De ahora en adelante, preste atención a la lectura de la Biblia, ya que ella lo convertirá en un siervo bien informado y preparado para la obra. A nuestro Padre celestial no le importa cómo nos vemos, si nuestra ropa es cara o no. Además, no necesitamos palabras bonitas para agradar a Dios, sino que tenemos que ser verdaderos en lo que decimos sin intentar enseñar al Señor. Después de todo, Él es soberano y completo en Sus obras. ¡Actúe con prudencia!

El apóstol Juan habló de lo que estaba escrito en la Biblia: Hay también otras muchas cosas que hizo Jesús, las cuales, si se escribieran una por una, pienso que ni aun en el mundo cabrían los libros que se habrían de escribir. ¡Amén! (S. Juan 21.25). El Salvador no dejó al hombre sin dirección para tomar buenas decisiones. Entonces, al leer la Palabra o escuchar el mensaje predicado en la iglesia, usted obtendrá la dirección correcta. ¡Crea!

 

En Cristo, con amor,

 

R. R. Soares


La Oración de Hoy

     ¡Señor, nuestro Maestro! Ayúdanos a prestar atención a Tu Palabra. Tus consejos vendrán de lo escrito, por obra del Espíritu Santo. ¡Necesitamos decir la Verdad para vencer las tentaciones, mientras somos purificados y nos convertimos en Tu templo!

Sabemos que en las multitudes hay diferentes personas, pero la unción recibida de Ti nos da las condiciones para tener éxito en el desempeño de Tu obra. Que tengamos y seamos lo que Tú quieres de nosotros. ¡Instrúyenos a llevar la Buena Nueva al mundo!

Siendo discípulos, debemos estar acostumbrados a hacer discípulos. Sin embargo, sin Tu revelación, no haremos el trabajo correctamente. Padre, quita de nuestros corazones la vanidad y lo que ella misma crea, porque es desesperadamente corrupta. ¡Ayúdanos, Dios!