Venimos ante Ti para darte gracias por la vida de los patrocinadores de Tu obra. Ellos sintieron Tu toque y tomaron la decisión de ayudar a la evangelización del mundo. ¡Eso es hermoso!

Estamos agradecidos por nuestro llamado ministerial. Desde el día en que nos llamaste, nuestro mayor deseo ha sido oír hablar de tus maravillas en la vida de personas que nunca habían oído hablar de Ti y de otras que habían oído cosas malas y despreciaban la fe en Cristo. Pero cuando vieron la seriedad de Tu obra, se entregaron a Jesús y hoy, como nosotros, son salvos. Te declaramos nuestra gratitud por haberlos llamado y salvado.

En este mundo, siempre tendremos aflicciones, pero hemos aprendido que Tú eres un refugio, una fortaleza y una ayuda muy presente en tiempos de angustia. Padre, abre la mente de más personas para que acudan a Tu refugio salvador.

Que crezcan en Tu gracia y en fe y experimenten el poder de Tu Nombre. Así serán sanados, liberados y bendecidos con todos Tus dones.

En el Nombre de Jesús, agradecemos y bendecimos a nuestros patrocinadores, diciendo: “Sean activos en fe en Cristo”.

Dr. R. R. Soares